Sobre la calle Berta Weber, de cara al mar, con típico frente revestido en madera pintado de gris y rojo, cualquier persona atenta que pase por allí descubrirá el Museo Shanti.

Nada de lo que puede verse por fuera denota el increíble mundo que existe adentro. Apenas uno entra, siente una mezcla agradable de aromas; el sonido de un silencio que suena a una suave (tal vez más de una) cascada de agua y, sobre todo, una energía inesperada que uno no siente hasta que se da cuenta que de pronto es otro mundo el que a uno lo rodea ahí dentro.

“Es una Casa Museo”, define Norma Castillo y completa diciendo “Casa Museo Shanti de Minerales, Malacología, Fósiles y Petrificados”, y se queda corta. Es que, en esas vitrinas, repisas y estantes, hay mucho más porque todo allí brilla con luz propia o con destellos y brillos de la luz que reciben las delicadas piezas según el lugar donde uno se ubique.

Cuenta Norma que todo empezó en 2003 cuando ella inició actividades de reiki “porque se trata de una terapia que se complementa en muchos aspectos con piedras y minerales. Me empecé a interesar y encontré un mundo que me atrapó y del que no tuve retorno”.

Envuelta en una modestia que parece natural, la propietaria del lugar dice que “esto que hay acá –y con la mirada hace un paneo rápido- es apenas un muestrario de los millones y millones de minerales que se encuentran día a día de manera inagotable”. “Llegó un momento que tenía tantas piedras y minerales que decidí compartirlos y fue así que el 10 de diciembre de 2013 abrí las puertas a la comunidad”.

Agrega Norma algo que puede verse a simple vista: “esto lo hacemos con mi familia y mi comadre, todo a pulmón y entre nosotros” y que “siempre vienen chicos de las escuelas y participamos también de la Noche de los Museos, quedándonos hasta bien tarde en la madrugada”.

“Los chicos se quedan maravillados con la piraña, el pez globo, los caracoles y los insectos que hay y eso me hace muy feliz”, indica Norma que también señala que “vienen muchos adultos coleccionistas y me gusta mucho responder sus preguntas e inquietudes”.

Al comentar que ha realizado algunos viajes dijo que “fuimos a Chubut porque nos habían dicho que había amatista y para mí amatista solo había en Misiones y sí, efectivamente encontramos y fue increíble porque también encontramos quarzo y ágata”.

Absolutamente orgullosa Norma dice que solo “hay seis museos similares a este en todo el país” y que entre los cientos de piezas que su museo exhibe actualmente hay algunas que son especiales, como las piedras de Quarzo blanco con cristales “que encontramos en Laguna Aguas Blancas en Tolhuin”, además de “estos ejemplares de Rodocrosita, que es la piedra nacional, aunque en lo personal me gustan todas”.

Casa Museo Shanti cuenta con más de 3.000 piezas en exhibición y ha sido declarado por el Municipio y la Provincia de “Interés cultural y turístico”. Actualmente, por la pandemia, funciona con visitas por turno (al 15 470204) de martes a sábados de 14 a 17 hs. En esos días y ese horario hay un mundo increíble esperando en Berta Weber 397.

Fuente: 94Veinte Magazine